martes, 18 de octubre de 2016

Agricultura, pesticidas, transgénicos y productos ecológicos

Los plaguicidas están presentes en los alimentos que ingerimos. Hace ya muchos años que se sabe que estos productos químicos afectan a nuestra salud. El siguiente documental explica sus efectos sobre el cuerpo humano.

RTVE

¿En qué se basa la agricultura ecológica? 

       Biodiversidad
  • Se cultiva una combinación de diferentes cultivos y variedades de plantas (asociación de cultivos) en el mismo campo, huyendo de los monocultivos que se utilizan en la agricultura industrial. De esta manera se consiguen muchas sinergias entre cultivos.
  • La diversidad biológica agrícola incrementa la resistencia de las plantas al cambio climático. Se ha demostrado científicamente que, tanto en la naturaleza como en la agricultura, la biodiversidad ofrece una póliza de seguro natural contra los fenómenos climáticos extremos.
  • Potenciar la biodiversidad natural, plantas silvestres, insectos beneficiosos, depredadores... es otra forma de garantizar un equilibrio fundamental para la explotación agrícola.

    No empleo de insumos químicos.
  • El control de plagas se realiza de forma natural mediante la potenciación de los sistemas naturales de control, por ejemplo mediante la introducción de insectos beneficiosos y pájaros que se alimentan de las plagas y de plantas que repelen a las plagas y atraen a los insectos beneficiosos. No está permitido el uso de productos químicos peligrosos ni el uso de transgénicos.
  • Los abonos naturales también son claves para la agricultura ecológica. Un suelo fértil se consigue con abonos verdes mediante, por ejemplo, el cultivo de leguminosas. La incorporación de estiércol animal y compost también enriquecen el suelo. Éstas son sólo algunas de las maneras de aumentar la materia orgánica y la fertilidad del suelo sin fertilizantes sintéticos. El uso de abonos naturales permite también un ahorro para los agricultores, y además elimina la necesidad de insumos artificiales. Con los abonos naturales, el suelo es rico en materia orgánica, más capaz de retener el agua, y permite una mejor protección contra la erosión. No está permitido el uso de fertilizantes químicos.

    El laboreo de la tierra
  • El suelo es el gran protagonista, se le trata como lo que es: un ente vivo muy complejo, respetando la infinidad de organismos que lo conforman, trabajando para mantener la fertilidad. Para ello es básico efectuar el mínimo laboreo posible, incluso ninguno en algunos casos, para no alterar su complejidad intrínseca y no perder las capas (horizontes) con mayor cantidad de materia orgánica.
  • Otro de los puntos básicos en la agricultura ecológica es la rotación de cultivos para que el suelo no se empobrezca, al contrario, se enriquezca, y para evitar el aparecimiento de plagas.
  • Greenpeace