martes, 26 de abril de 2016

Accidentes nucleares: Chernobyl (1986). Contaminación transfronteriza.

El 26 de abril de 1986 el mundo desconocía que estaba ocurriendo el accidente nuclear más grave nunca conocido.  El mundo se estremecería días después, cuando empezaron a conocerse mediciones anormalmente altas de contaminación radiactiva en lugares tan alejados de Chernobyl como Suecia. El secretísimo soviético retrasó la noticia hasta que ya era imposible contenerla: una explosión en el reactor número 4 de la central nuclear de Chernobyl estaba liberando radiactividad en cantidades cientos de veces superior a la explosión de una bomba nuclear. Se rompía así definitivamente el mito de que la energía nuclear era limpia y segura.

Las cifras oficiales sólo reconocen 31 víctima se mortales, pero la realidad es otra. Tras el accidente miles de personas (hasta un total estimado de 600.000) trabajaron durante algunos minutos para apagar el fuego o cubrir el sarcófago de la central. Se llamaron los “liquidadores”. Miles de ellos han muerto de cáncer o de enfermedades relacionadas por la exposición a la radiactividad, pero nunca han sido contabilizadas ni reconocidas como víctimas. El “olvido” de los liquidadores  y su total abandono es una de las mayores injusticias de la historia reciente.